Hotel Baia da Barca

Baía da Barca

Nuestro concepto

La necesidad de crear un lugar que acogiera dignamente a nuestros visitantes; el trabajo, la perseverancia y la dedicación a un viejo sueño que hoy se llama Baía da Barca, llevó a sus socios a afrontar este reto como estímulo para el desarrollo del proyecto en armonía con su entorno.

La construcción de un conjunto de apartamentos a pocos metros del mar fue planeada hasta el más mínimo detalle, desde su encuadre arquitectónico con la roca volcánica, su protección contra todo tipo de clima y principalmente pensando en la comodidad y exclusividad de la experiencia de sus huéspedes con la belleza natural existente.

Somos una propiedad versátil que combina el servicio de alojamiento con una experiencia de relax en una relación y simbiosis única del ser humano con todos los elementos de la naturaleza, así, las soluciones propuestas en unidades panorámicas con vistas al mar, a las montañas y a las islas vecinas son ideales para aquellos que quieren que ilha do Pico sea una base para unas vacaciones memorables, permitiendo un conjunto de experiencias en las tres islas que componen el conocido triángulo de las Azores (Pico, Faial y S. Jorge).

Hotel Baia da Barca

Destino: Ilha do Pico

Ilha do Pico es una isla segura y tranquila, con un clima suave durante todo el año, y una amplia oferta centrada en el turismo de naturaleza, con la montaña de Pico como telón de fondo con sus 2.351 metros de altitud y toda la belleza que la rodea.

Aquí podrá disfrutar del Paisaje Protegido de la Cultura de la Vid de ilha do Pico, clasificado por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad, y degustar la variedad y riqueza de la gastronomía local, y disfrutar de una estancia en un destino tranquilo y sostenible, sin turismo de masas y en comunión con la naturaleza pura y virgen.

Hotel Baia da Barca

Vila da Madalena tiene un estilo de vida apacible y muy tranquilo, ideal para quienes necesitan huir del estrés de las grandes ciudades y no quieren estar completamente aislados del mundo.

Las olas de nuestra bahía durante el invierno y las aguas cristalinas en el verano proporcionan tranquilidad y una belleza única justo en nuestra puerta.